El bosque primigenio y Peña Tejedo

MONTAÑA PALENTINA Parque Natural
El bosque primigenio y Peña Tejedo
Testigos de la gran extinción

 

Desde tiempos ancestrales, el ser humano se ha beneficiado de los múltiples recursos de los bosques de la Montaña Palentina, para lo que fue necesario transformar su fisonomía. Solo algunos se han librado de la sobrexplotación o la sustitución de especies y de ellos aún menos, conservan su antigua diversidad ancestral. El robledal de Celada de Roblecedo, haciendo honor su nombre (celada, lugar escondido), se acerca mucho a ese bosque primigenio rico en diversidad. El tipo de manejo, principalmente de adehesado y ramoneo (para sacar vigas, carbón y alimento para el ganado), unido a la dificultad de extraer la madera, han permitido el mantenimiento de muchos grandes robles. El abandono de esa intensidad de explotación ha propiciado el retorno a sus orígenes, con la presencia de robles de más de 500 años acompañados de un plantel de especies de árboles, arbustos y herbáceas que dan cobijo y alimento a un sinfín de especies animales.
Tras salir del bosque, el camino nos conducirá ladera arriba a uno de los miradores más excepcionales de Montaña Palentina. Allí, además de las impresionantes vistas, podremos ver, prestando un poco de atención, los vestigios de uno de los acontecimientos más catastróficos para la vida que ha sufrido el planeta, ocurrido hace 250 millones de años.

Perfil de ruta

Altitud máxima...............1812 m

Altitud mínima...............1191 m

Desnivel...............618 m

Distancia...............10 km

Duración...............3 h y 30 min

Tipo de recorrido...............lineal

Dificultad...............alta